Doce minutos fue lo que duró en la cancha Fernando Uribe la noche de este sábado, ante el Deportivo Independiente Medellín, en su reaparición tras el fallecimiento de su madre María Elena Hincapié. Fue un día agridulce. 

Esos minutos en la cancha le permitieron volver a sentirse un jugador del equipo, luego de tantos inconvenientes personales, físicos y deportivos, que no le han permitido jugar este semestre. 

Uribe reapareció con gol, cuando a los 71 minutos cerró con una exquisita definición una gran jugada armada con recuperación de Nelson Deossa y una asistencia perfecta de Carlos Bacca al pereirano. 

Fue su tanto 100 como profesional en Colombia, todo un récord personal que destacó el mismo club en sus redes sociales. 

"¡Fernando Uribe completó 100 goles por Liga Colombiana. ¡Goleador total!", afirmó Junior en sus redes sociales.  

Su hermano Juan Camilo Uribe le dedicó el gol a su recién fallecida madre: "Te amamos. Eres grande, mi mamá feliz desde el cielo". 

El mismo Uribe, en entradas horas de la noche, reconoció el valor del tanto y lo dedicó a su mamá: "Gloria a Dios, para ti mamá", escribió en su Instagram. 

Mientras Uribe corría para celebrar ese gol, al tiro de esquina en el sector suroccidental de la cancha, quedó inmóvil. 

El estadio comenzó a aplaudir con fervor, por un instante la gente pensó que era un shock emocional por la serie de emociones de los últimos.

La verdad fue que Uribe pidió una camilla para salir, producto de un tirón que sintió en la pierna. 

Una vez en ella, el jugador se quebró en lágrimas, ante la impotencia y todo lo que esto conllevaba, una posible ausencia de más fechas sin jugar. 

Una vez en rueda de prensa, el entrenador Juan Cruz Real dio parte de la situación. 

"Fernando tuvo una molestia en el tendón, aparentemente nada grave. Esperemos que esté bien, lo importante es que volvió a jugar", comentó. 

Lo cierto es que fue un momento agridulce para un goleador que no ha tenido continuidad en el equipo pero que poco a poco deja ver su calidad.